Casa de tierra en Eskoriatza, Gipuzkoa
Después de Etxetxo, ésta es la segunda casa que estamos realizando con muros de carga de tierra cruda construidos utilizando la técnica de tapial. Al igual que la anterior, en ésta también se han seguido criterios de bioconstrucción y bioclimática.
Los muros exteriores en su mayor parte son muros de carga de tierra. De esta forma, además de conseguir una buena inercia térmica y un buen aislaminto térmico y acústico, se permite la permeabilidad a las ondas y se regula la humedad interior del edificio.
El resto de la estructura es de madera de cedro de bosques gestionados de manera sostenible y está diseñada con medidas de geometría natural.
El cerramiento se ha terminado con bloque cerámico de baja densidad allá donde el tapial no era posible. Y también se empleará el ladrillo caravista con entramado de madera.
El resto de los materiales son también naturales, no emiten substancias tóxicas y reciclables: carpintería de madera de bosques gestionados de manera sostenible; corcho y fibra de madera como aislante; pinturas naturales al silicato; aceites ecológicos para las terminaciones de la madera; tuberías de polietileno para el abastecimiento de agua y de polipropileno para el saneamiento.
Se ha realizado una instalación eléctrica biocompatible y se utilizarán tubos y cables libres de halógenos.
Para la calefacción se emplearán el invernadero y una estufa acumuladora cerámica.
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